Hoy tenemos el placer de hablar con Laura Chamorro, directora de la plataforma de promoción y difusión líder en Euskadi, Gipuzkoa de Moda.

La digitalización está cambiando el modus operandi de la mayoría de sectores, incluido, por supuesto, el de la moda. Mayor visibilidad, mayor alcance e incluso la posibilidad de crear productos sostenibles, son solo algunas de las ventajas que nos proporciona este nuevo proceso de transformación que ha llegado para quedarse.

Periodista, presentadora y mujer emprendedora, Laura lleva más de 13 años en el Diario Vasco, viviendo, desde dentro, todos los cambios en el sector de la Moda. Ella conoce mejor que nadie todos los entresijos de este sector y nos los cuenta en la siguiente charla.

La entrevista

– ¿Cómo y cuándo surgió tu pasión por el periodismo?

En noviembre del 2012 lanzamos el programa y el blog. Vimos que, en tan solo dos meses, el tráfico era increíble. Había posts que superaban las 30.000 visitas, nada habitual para aquel entonces. En mayo del 2013 nos tiramos a la piscina y decidimos organizar el primer desfile en el museo San Telmo. La respuesta fue muy buena y a partir de ahí todo fue creciendo.

Primero hicimos como evento la edición primavera-verano, luego la de otoño-invierno, y a partir de ahí surgieron proyectos en paralelo como Zarautz moda, desfiles de medio ambiente, y pudimos empezar a dar presencia y visualización de la moda vasca en el Zinemaldia.

El espaldarazo definitivo a nivel de redacción, se produjo hace 2 años cuando se estrenó el canal propio en el diario vasco.com. Esto hizo que nos adelantáramos a la profunda digitalización que sufrió el sector. El blog se convirtió en web. De web pasamos a canal propio con multitud de contenidos. De tener un evento, pasamos a hacer dos ediciones de desfiles y, posteriormente, lo convertimos en todo un festival con muchas actividades y presencia en todo Euskadi.

Se me han propuesto ofertas laborales y proyectos atractivos, pero siempre he puesto a GDM por delante. Los resultados de este 2021 me demuestran que no me equivoqué. Hemos sido capaces de superar cualquier crisis y adaptarnos a la digitalización.

El 2020 nos ha venido bien para tomar distancia y madurar. Se ha profesionalizado muchísimo en el ultimo año también en el evento y la web, haciendo que las audiencias se hayan cuadruplicado.

– ¿Qué hizo que te decidieras por cambiar tu devoción por el periodismo deportivo al de moda?

Siempre me ha fascinado la moda. Comprarme ropa, ver desfiles, leer revistas de moda…Nada más entrar en televisión estuve en deportes y me tiré varios años en esa sección. En 2010 comencé a presentar eventos y proyectos de moda para Teledonosti y en el verano de 2012 planteé el nacimiento de Gipuzkoa de Moda que nació en paralelo a un blog. En el momento que empecé a presentar el programa de moda, de forma natural, fue como me di cuenta de que la moda era lo mío.

– ¿Qué hizo que te decidieras por cambiar tu devoción por el periodismo deportivo al de moda?

Siempre me ha fascinado la moda. Comprarme ropa, ver desfiles, leer revistas de moda…Nada más entrar en televisión estuve en deportes y me tiré varios años en esa sección. En 2010 comencé a presentar eventos y proyectos de moda para Teledonosti y en el verano de 2012 planteé el nacimiento de Gipuzkoa de Moda que nació en paralelo a un blog. En el momento que empecé a presentar el programa de moda, de forma natural, fue como me di cuenta de que la moda era lo mío.

– ¿Cómo surgió la plataforma Gipuzkoa de Moda?

En noviembre del 2012 lanzamos el programa y el blog. Vimos que, en tan solo dos meses, el tráfico era increíble. Había posts que superaban las 30.000 visitas, nada habitual para aquel entonces. En mayo del 2013 nos tiramos a la piscina y decidimos organizar el primer desfile en el museo San Telmo. La respuesta fue muy buena y a partir de ahí todo fue creciendo.

Primero hicimos como evento la edición primavera-verano, luego la de otoño-invierno, y a partir de ahí surgieron proyectos en paralelo como Zarautz moda, desfiles de medio ambiente, y pudimos empezar a dar presencia y visualización de la moda vasca en el Zinemaldia.

El espaldarazo definitivo a nivel de redacción, se produjo hace 2 años cuando se estrenó el canal propio en el diario vasco.com. Esto hizo que nos adelantáramos a la profunda digitalización que sufrió el sector. El blog se convirtió en web. De web pasamos a canal propio con multitud de contenidos. De tener un evento, pasamos a hacer dos ediciones de desfiles y, posteriormente, lo convertimos en todo un festival con muchas actividades y presencia en todo Euskadi.

Se me han propuesto ofertas laborales y proyectos atractivos, pero siempre he puesto a GDM por delante. Los resultados de este 2021 me demuestran que no me equivoqué. Hemos sido capaces de superar cualquier crisis y adaptarnos a la digitalización.

El 2020 nos ha venido bien para tomar distancia y madurar. Se ha profesionalizado muchísimo en el ultimo año también en el evento y la web, haciendo que las audiencias se hayan cuadruplicado.

Hoy en día los procesos de compra han cambiado y ya no se permite cualquier cosa en el sector de la moda.

– Cuéntanos un poco acerca del desfile GK Green Fashion y por qué consideras importante unificar la sostenibilidad con la moda.

Hay que tener en cuenta que la segunda industria más contaminante del planeta es la moda. Este proyecto surgió en el 2016, de la mano del departamento de medio ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa que hasta entonces no habían tocado la moda. Vimos que en había un nicho bastante potente y decidimos que era importante visibilizar la moda sostenible de nuestro territorio.

Hoy en día los procesos de compra han cambiado y ya no se permite cualquier cosa en el sector de la moda. Esto ha provocado que incluso los más grandes se hayan tenido que adaptar, debido a la conciencia social de las nuevas generaciones.

Ya no se concibe la moda fast fashion con un consumo sin medida. Se aboga por un consumo responsable y otras vías de consumo: ropa de segunda mano, productos orgánicos y reciclados, respeto por los derechos humanos…

Una sensibilidad que aboga también por lo artesano, lo singular y lo local. Al estar más informados, ya no nos conformamos con cualquier cosa.

– ¿Una mujer emprendedora tiene más dificultades que un hombre emprendedor según tu experiencia?

Yo particularmente nunca he tenido esa sensación. Me considero una mujer emprendedora porque dentro de estos 9 años de proceso de GDM he sido una tía que se ha tirado a la piscina lanzando mi empresa y colaborando con multitud de entes públicos. Lo que sí tengo es la sensación de que tenemos que demostrar más pero no por ser mujer si no por el sector de la moda.

Quien no lo conoce lo considera más frívolo que otros sectores. La moda siempre se ha movido entre dos aguas, la parte industrial y la cultural, y por ello creo que tenemos que demostrar más. Si en vez de liderar un proyecto de política lideras un proyecto de moda, se juzga distinto. Cuesta que te tomen en serio a veces. Hay que gestionar que no puedes gustar a todo el mundo. También, saber que es un sector en el que hay que trabajar 24/7 porque no siempre todo sale como queremos.

No obstante, cada vez creo que se le esta dando más valor. Personas como yo tenemos que estar al margen de la frivolidad que muchas veces tiene la gente, tirar para adelante y que digan lo que digan, ya se sumarán al carro.

Muchas veces la gente se queda con esa Laura que se pone el vestido largo y el moño y sale a presentar cualquier evento. Eso solo es el 2% de mi trabajo y lo que menos me preocupa.

– ¿Ha sido complicado llegar hasta donde has llegado?

Mucho. He tenido que sacrificar muchas cosas, pero con gusto, porque el periodismo es mi pasión. Nadie sabe el trabajo que hay por detrás. Muchas veces la gente se queda con esa Laura que se pone el vestido largo y el moño y sale a presentar en San Telmo, en Balenciaga o cualquier evento. Eso solo es el 2% de mi trabajo y lo que menos me preocupa.

Ha habido momentos de mucho sufrimiento, pero todo compensa. Ahora GDM se ve como una plataforma gigante y de referencia, pero nació en TeleDonosti, una televisión local con pocos medios. La moda no tenía protagonismo en el canal y me siento orgullosa, porque echo la vista atrás y me doy cuenta del camino que hemos recorrido en una provincia tan pequeña.

En dos meses nos dimos cuenta de que tenía mucho éxito y ahora, casi 9 años después, me dedico en cuerpo y alma a “mi hijo” GDM.

– ¿Ha cambiado mucho tu vida desde que eres un personaje público?

Totalmente. No recuerdo como era antes de ser personaje público. Con 20 años ya empecé en televisión con una sobreexposición muy grande de la que no era ni consciente. Yo quería estar en la radio y terminé en la tv.

Sin embargo, no cambiaria mi vida por nada, ya que me ha abierto muchas puertas y me he rodeado siempre de personas maravillosas.

– ¿Crees que los influencer van a desaparecer?

Para nada. Yo he conocido la generación de los bloggers, youtubers, el boom de Instagram, de Tik tok…

Lo que pasa es que se van a reinventar. La época que lanzamos en la tv GDM entrevistamos a muchas influencers tales como Lovely Pepa, Madame de Rosa, Alexandra Pereira…y tod@s han sido inteligentes abriendo sus propias empresas. Chiara Ferragni por ejemplo, es ya más empresaria que influencer. Ha creado todo un imperio de publicidad con su marca.

Es importante también tener en cuenta y gestionar que hay una parte que te adorará y otra que te detestará, sin saber la razón. Es importante saber sacar siempre la mejor versión de ti mismo a través de las críticas.

Los influencers tienen una presencia digital muy importante pero realmente son influyentes cuando consiguen crear debates, hacer que se compre un determinado producto… no todo el mundo es capaz de eso.

Fotografía de Laura Chamorro.

– ¿Qué consejo le darías a alguien que quiere empezar como influencer o en algo relacionado con el mundo de la moda? ¿Y a alguien que quiere emprender?

Influencer se nace. Es algo que se lleva de forma natural. Hay gente que no pasa desapercibida, aunque quiera. Hay una frase que dice “que hablen bien o mal pero que hablen de ti” y con los influencers pasa lo mismo.

Uno de los mejores consejos que me han dado a mi en los inicios de GDM es “sueña con lo imposible y lo conseguirás”. No hay que tirar la toalla, siempre hay oportunidades. Lo que pasa es que requiere mucho esfuerzo.

A veces alucino con gente que tiene mucho potencial pero que no quiere meter horas de más y en periodismo, por lo menos, no hay horarios. Es un mundo muy competitivo y ganan los mejores. No hay nada por casualidad y se trata de ser avispado.

No hay que tener miedo a cometer errores. Si se fracasa, siempre se puede volver a empezar y no pasa nada.

– ¿Redactora, presentadora o influencer? ¿Con cuál te quedarías si tienes que elegir una y por qué?

Comunicadora, que lo engloba todo. Soy periodista, presentadora y creo que tengo cierta influencia a nivel local y regional por trabajar además en el Diario Vasco.

Pero si solo pudiera elegir una, aunque a muchos pueda sorprender, me quedaría con redactora. Lo de las redes puede ser efímero y considero que, a través de la redacción, puedes llegar a mucha gente y seguir siendo influyente.

Me quedaría gestionando proyectos de moda y redactando, que considero que requiere de cierta habilidad y talento. Es además un trabajo a largo plazo y creo que es el más completo.

– ¿Qué trabajo o colaboración destacarías como la más significativa para ti?

Muchas. Con todas las que han venido al Festival de Cine de San Sebastián y al museo Balenciaga. Firmas como Roberto Torretta, Roberto Verino, Agatha Ruiz, Echeverría… Cuando vinieron estaban viviendo su momento más dulce y jamás me habría imaginado trabajar con ellas. Todas me han enseñado y aportado mucho.

Traer a grandes figuras a Donostia y hacerlo a través de pocos medios fue algo increíble.

Cuando colaboré con Fomento de SS, con el Clúster de la moda, hicimos contactos con escuelas de diseño internacionales como Marangoni, estuvimos en Sistema Moda Italia, conocimos empresas como Gucci, Loewe y Armani desde dentro… Yo soñaba con todo esto.

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